"Primero vamos a darle las gracias a Dios por todo. Pero también a la gente de San Pedro, que hizo su sueño realidad: convertirse en un cantante". De esa manera, Renato despidió a su hijo Leonardo Renato "El Kid" Alvarado. Segundos después de esas palabras, su féretro fue colocado en la fosa del Cementerio Municipal de Juan Díaz.
El intérprete de "La chica de los ojos café", desconsolado, también pidió disculpas a los presentes, pues tenía la necesidad de hablar con su hijo en inglés antillano, y en esa lengua pidió que Dios lo tenga en su gloria, porque "no era un chico malo".
A la misa de cuerpo presente realizada en la Parroquia San Pedro Apóstol, en San Pedro, Renato llegó con cinco minutos de retraso y no tardó en agarrar entre sus brazos a su nieta Emily, de ocho años de nacida, quien se durmió en su regazos chupándose el dedo pulgar.
Junto a Renato, familiares, vecinos y amigos destacaron la bondad de Leonardo, un reguesero que no era violento y respetuoso.
También solicitó a sus fans que sigan escuchando su música, pues él no está muerto, sino hasta que se le olvide.