Un certero disparo en el muslo izquierdo recibió ayer en la tarde Santos Batista, de 30 años de edad.
El hombre llegó en compañía de su hermano, quien se movilizó desde la comunidad de la 24 de Diciembre, en Tocumen, hasta el Hospital Santo Tomás, en taxi.
Eran las 5:00 p.m. cuando las unidades policiales pensaban que todo el revuelo había pasado. Sin embargo, el equipo de "Crítica" divisó un taxi color verde del cual sobresalían los pies de una persona, lo cual alertó. Batista se quebaja del dolor cada vez que le bajaban la pierna.
Ingresó al Cuarto de Urgencias con la ayuda de los vendedores de las funerarias, pues no había ningún personal idóneo que lo movilizara.
Los médicos lograron estabilizarlo y está fuera de peligro. Se desconoce el móvil, pero se investigará.
