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Desplazados colombianos no deben temer por censo
Redacción
Crítica en Línea
El subcontralor de la Nación, Enrique Lau Cortés, aseguró que los desplazados colombianos no deben temer al momento de suministrar los datos personales para el décimo censo de población a realizar el 14 de mayo próximo. Aseguró que estos datos serán de estricta confidencialidad y no podrán utilizarse para ningún otro fin, ya que el Decreto 152 así lo establece. Asimismo señaló que el costo de este censo asciende a unos 9.7 millones de balboas y en la actualidad para la última fase se están usando 6.5 millones en promoción, preparación y pagos a las personas encargadas de empadronar a la comunidad. Destacó que en todo el país se utilizarán unos 100 mil empadronadores para efectuar los censos de población y vivienda, conocido como "de facto o de hecho", pues serán censadas aquellas personas que se encuentren físicamente dentro de las viviendas el 14 de mayo próximo. Añadió que todo está preparado para iniciar la fase final de los censos que se organizan desde hace tres años. Según Lau Cortez, el censo anterior arrojó cifras que no reflejan la realidad en relación con la cantidad de personas discapacitadas, ya que internacionalmente se estima que el porcentaje debe oscilar entre el 10% del total de la población de un país, sin embargo, en Panamá solo alcanzó el 1%, por lo que existe un subregistro en ese sentido. Lau hizo un llamado a la población para que permanezca en sus hogares y pueda ser censado. Luego de ser empadronadas, a las personas se les otorgará un salvoconducto para que transiten libremente. En tanto, 40 desplazados colombianos que se encontraban en la comunidad de Jaqué en el Darién regresaron bajo sus propios medios a Juradó, en territorio colombiano, según informó José Del Carmen Serracín, Director de la Oficina Nacional para la Atención de los Refugiados (ONPAR). Serracín explicó que el motivo del retorno de estas personas se debió a que en Colombia ya empezó el período de clases desde el 1º de marzo, y como Panamá no había oficializado a través del Ministerio de Educación un mecanismo legal que admitiera a sus niños en escuelas nacionales, optaron por la repatriación voluntaria. Después de los primeros 40 desplazados, otro grupo de 60 personas decidió regresar, pero esta vez fueron administrados por el gobierno panameño junto miembros de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. En otras regiones del país no se encuentran desplazados que hayan ingresado recientemente, excepto aquéllos que ya cumplen cuatro o seis años en los sectores de Boca de Cupe, Yaviza y Yapé, cerca del río Tuira y que suman 250 personas. En Puerto Obaldía, Comarca Kuna Yala, viven otros 150.
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En otras regiones del país no se encuentran desplazados que hayan ingresado recientemente, excepto aquéllos que ya cumplen cuatro o seis años en los sectores de Boca de Cupe, Yaviza y Yapé, cerca del río Tuira y que suman 250 personas. En Puerto Obaldía, Comarca Kuna Yala, viven otros 150.
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