Como dice el viejo adagio que "recordar es vivir", en una ocasión nos remontamos al año de 1970, cuando iniciamos nuestras tareas educativas en el corregimiento de Chilibre, en el puesto de director de la escuela Tomás Arias; en aquella memorable fecha se carecía del sistema de agua potable en toda esta región y sus lugares aledaños.
Los habitantes suplían sus necesidades del vital líquido, de las quebradas, ríos y pozos, que en aquella época no estaban contaminados como en la actualidad; donde personas irresponsables tiran toda clase de basura y deforestan sus entornos.
En el año de 1975, gracias a la construcción de la Planta Potabilizadora de Chilibre, el corregimiento empezó el uso del agua potable en los lugares más poblados del corregimiento, como fueron: Buenos Aires, Agua Bendita, San Vicente, Caimitillo y Chilibre Centro entre otros; por 35 años la Planta Federico Guardia Conte de Chilibre ofreció el vital líquido a los populosos sectores de la capital de la República, San Miguelito, Las Cumbres y Chilibre.
Todos en aquella histórica y memorable época, nos sentíamos muy orgullosos como panameños de que las instituciones internacionales de Salud calificaran a la Planta Potabilizadora de Chilibre como "Fuente de la Mejor Agua del Mundo".
El crecimiento de la población, a nivel del corregimiento y de toda la población de la ciudad de Panamá y lugares aledaños, fue el factor determinante para que las autoridades llegaran a la conclusión de que se necesitaba la ampliación de la Planta Potabilizadora de Chilibre, que siempre ofreció un buen servicio a la comunidad con excepción de ciertos lugares, donde no existe una buena planificación y en la que la naturaleza registra situaciones impredecibles, que han sido la causa de muchos inconvenientes; pero los panameños hemos demostrado mucha capacidad en la administración del Canal de Panamá y la Planta Potabilizadora de Chilibre. ¡Viva, Crítica en Línea Panamá!