Los familiares de Mónica Serrano se sienten frustrados ante la inoperancia de las autoridades policiales y de investigación, quienes no han podido dar con el paradero de la niña que desapareció cuando tenía un año y seis meses de edad. Hecho ocurrido el 8 de febrero de 2003.
Mónica, madre de la niña, cuestionó el hecho que los propios condenados por este delito han confesado y cómo es que las autoridades no han podido sacarle la información de dónde esta mi hija.
Sentenció, que cada vez que ella ejecuta una acción personal a fin de localizar a su pequeña, ellos (autoridades) me llaman para informarme que continúan buscando a Mónica, pero es falso.