A una semana de registrarse la muerte de 3 presuntos guerrilleros de las FARC en Balsal, en el Alto Tuira, en Darién, no hay reclamo de los cadáveres que permanecen en la Morgue Judicial de Panamá desde el pasado viernes cuando fueron exhumados de una fosa común en La Palma, informó el director del Instituto de Medicina Legal, Humberto Mas.
A los cadáveres se le practicaron las pruebas forenses odontológicas y se realizaron los análisis de huellas dactilares que son cotejadas con autoridades de Colombia, como de tejidos para el ADN.
Por ahora, no se conoce qué suerte tendrán los cuerpos que podrían permanecer hasta un mes en la Morgue Judicial como se establece en casos de cadáveres no identificados.
Uno de los cuerpos es de Víctor Manuel Soto, según la identidad encontrada en su poder.
Los hombres murieron a manos de unidades del Servicio Nacional de Fronteras y recibieron disparos en la cabeza, abdomen y piernas, de acuerdo a los informes.
El Gobierno dijo la semana pasada que hubo un intercambio de disparos entre los guerrilleros y las unidades que patrullaban el Alto Tuira.
Producto del enfrentamiento murieron los insurgentes en tierra panameña.