El fiscal electoral Boris Barrios renunció ayer sorpresivamente al cargo por el cual fue nombrado hace un año. Aunque no reveló las razones de su dimisión, todo indica que lo motivó la posibilidad de que la Corte Suprema de Justicia autorizara su separación y arresto.
Barrios enfrenta un proceso por un caso que se remonta al 2005 cuando fungía como Notario Primero de Circuito. La Sala Penal debía decidir su suerte.