La Asociación Panameña de Hoteles (APATEL) consideró de "insuficiente" la suspensión por 90 días de los ajustes tarifarios y abogó por una política energética más firme que beneficie a los usuarios, a fin de que el incremento de la electricidad, "no perjudique al sector, evite la reducción de plantillas y el cierre de hoteles".
El gerente general del hotel Royal Decameron, Jorge Loaiza declaró que el alza de la energía perjudicará al sector al punto que podría obstaculizar la inversión de nuevos centros de alojamiento. Indicó que la solución al problema no puede ser de 90 días, se requiere es suspender de manera definitiva el incremento anunciado para el año 2006.
Jorge Porras, gerente general del hotel Country Inn Suites, opinó que es necesario invertir en hidroeléctricas como una medida para frenar el problema. Aseguró que los inversionistas interesados en Panamá se resisten porque los precios de la energía son altos comparados con otros países.