Funcionarios del Gobierno de Honduras han sido amenazados de muerte por el crimen organizado, por lo que se han reforzado las medidas de protección alrededor de ellos, aseguró ayer el ministro de Seguridad, Oscar Álvarez.
El funcionario, sin embargo, no precisó quiénes son los amenazados ni dijo si se trata de ministros o funcionarios de menor categoría, aunque refirió que algunos se desempeñan en sectores como justicia y seguridad.
Las amenazas "vienen del crimen organizado", y los servicios de seguridad del Estado las analizan y refuerzan la vigilancia ante aquellas "que ameritan mejorar la seguridad de un funcionario", subrayó Álvarez, en declaraciones a periodistas.
"En otros casos, (a los amenazados) los mantenemos bajo vigilancia para evitar que se vaya a cometer un acto en contra de un funcionario de Gobierno", remarcó.
"Estamos viviendo en un país complicado, un país que lo heredamos con mucha violencia y delincuencia y esos son los resultados, pero nosotros jamás vamos a dar un paso atrás", aseguró.