Las autoridades de Boca del Río, municipio del este de México, rescataron a 20 niños de un hogar religioso donde presuntamente eran objeto de abusos sexuales por parte de un sacerdote y una monja católicos.
La Alcaldía de Boca del Río, localidad asentada a 600 kilómetros de la capital del país, en el estado de Veracruz, presentó una denuncia penal para que se investigue lo sucedido en el hogar "Manuel Pío López".
El presidente municipal de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez, reveló que recibieron quejas y testimonios de niños que eran maltratados físicamente y sometidos a abusos sexuales por parte del padre José de Jesús Sandoval González y la monja María Guadalupe Zaragoza Barajas.
Los niños que se atrevían a relatar lo sucedido eran castigados haciéndoles comer chile (picante) o comida descompuesta.