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La Policía guayanesa admitió ayer que la escasa formación y los bajos sueldos son factores que contribuyen a la escalada de asesinatos, corrupción y otros delitos que cometen sus agentes.
El presidente de la Autoridad de Quejas contra la Policía (PCA), Cecil Kennard, afirmó que "el uniforme y las armas" hacen que los jóvenes agentes se sientan investidos de autoridad para "usar las armas de fuego indiscriminadamente".
Kennard compareció ayer ante la comisión de cinco miembros nombrada por el Parlamento para analizar este problema.
Los policías jóvenes "son muy agresivos y hostiles", dijo Kennard en el legislativo, y recordó que la formación académica de la mayoría de ellos es muy baja.
Con unos sueldos mensuales mínimos de 25.000 dólares guayaneses (126 dólares), la extorsión y la corrupción son endémicas entre los oficiales de Policía, señaló el presidente de la PCA.
El gobierno de EEUU, la organización humanitaria Amnistía Internacional y la Asociación de Derechos Humanos de Guayana han denunciado el alarmante número de supuestos asesinatos cometidos por policías. |
