El Stuttgart derrotó a domicilio por 3-1 al Panathinaikos gracias a una clara reacción que tuvo en la segunda parte tras haber sufrido muchísimo ante los griegos en la primera parte.
El Stuttgart tuvo un comienzo desastroso y le permitió al Panathinaikos ejercer un claro control del partido durante los primeros cuarenta minutos del compromiso.
El Stuttgar lograba interesantes combinaciones ofensivas y había recuperado el orden gracias con el ingreso de Thorsten Held y Alexander Hleb, justo los dos hombres que Magath había dejado afuera para hacer su experimento de jugársela toda al ataque por las bandas.
En una de esas combinaciones, el lateral Fissas desvió hacia la propia portería un centro de Kevin Kuranyi logrando el empate para el Stuttgart.
Cada pérdida del balón en el área del Panatinaikos era respondida por un contragolpe y, en dos de ellos, entre el minuto 77 y 75, el Stuttgart sentenció el partido con goles de Kuranyi y de Hinkel. |