Las autoridades de la sureña región chilena de La Araucanía manifestaron ayer su preocupación por el repunte de la violencia en la zona, cuna de los mapuches y donde el pasado fin se semana encapuchados quemaron una hacienda. Los asaltantes incendiaron el fundo Santa Rosa, propiedad del agricultor Eduardo Luchsinger, ataque que fue reivindicado por la Coordinadora de Comunidades Mapuches Arauco Malleco (CAM).