Pasa mayormente con aquellas personas que tienen perros. Estos animales, que en algunos casos son un amor y actúan con mucha docilidad, pueden llegar a convertirse en verdaderas molestias para sus dueños y, peor aún, para los vecinos.
Hay comunidades donde se ven a perros en soltura a toda hora, los que se meten a la casa ajena y destruyen todo. Agarran con sus fuertes mandíbulas la ropa que está tendida y salen con ella por la calle; riegan basura y destruyen jardines.
También hay casos de perros que son peligrosos, y atacan a los transeúntes. Con este tipo de animales hay que ser muy cuidadoso, porque los daños causados serían responsabilidad de sus propietarios, a quienes se les puede acusar en la corregiduría por no atender adecuadamente su mascota.
Tal vez la peor parte está los ladridos. Los perros no dejan dormir a nadie cuando no han sido domesticados adecuadamente. Hay que enseñarles el respeto, no dejarlos solos mucho tiempo porque se ponen nerviosos y les da por destruir.
Si se va a tener una mascota de este tipo que sea en una casa independiente, y no en un apartamento. Además, es conveniente tratarlo con suficiente amor, pero no malcriarlo, porque las consecuencias son demasiado molestosas para propios y extraños. |