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Paramédicos israelíes atienden a varios heridos en Tel-Avív.  |
Al menos 18 personas resultaron heridas, tres de ellas de gravedad, en un atentado suicida en Tel Aviv que costó la vida a su autor palestino ayer, pocas horas después de que el ejército israelí matara a tres miembros del Movimiento de Resistencia Islámica palestino (Hamás).
El jefe de la policía de Tel Aviv, Yossi Setbon, que dio a conocer el balance durante una rueda de prensa improvisada en el lugar del atentado, indicó que, contrariamente a la versión policial inicial, el kamikaze no iba en una motoneta.
La confusión, explicó, se debió a que hizo explotar la carga que llevaba encima cerca de una motoneta. El ataque se produjo en una calle peatonal, Newe Shaanan, de un barrio popular homónimo donde viven numerosos trabajadores inmigrantes.
La calle estaba muy concurrida por la mañana, pocas horas antes del inicio del Shabbat, el día de descanso semanal judío. Una hora después del atentado se podían ver aún jirones de piel del kamikaze sobre la acera frente a comercio de venta de bebidas alcohólicas, comprobó la AFP.
El último atentado en Israel se remontaba al martes, cuando un palestino abrió fuego contra la gente en el centro de Jerusalén, matando a dos mujeres e hiriendo a 40 personas.
Hamás, la principal organización islamista palestina, anunció el martes una "guerra total" contra Israel después de que el ejército matara a cuatro de sus militantes durante una incursión en la ciudad autónoma de Naplusa (norte de Cisjordania).
Después del ataque en Tel-Avív, aviones F-16 israelíes bombardearon en la noche posiciones palestinas en las ciudades de Gaza y Tulkarem (Cisjordania), informaron fuentes de los servicios palestinos de seguridad.
Aviones israelíes dispararon en dos ocasiones durante la noche contra un complejo de la seguridad palestina, el campo Ansar, frente al cuartel general del presidente palestino Yasser Arafat en la ciudad de Gaza, que Israel ya había bombardeado varias veces, precisaron las fuentes.
Los dos bombardeos sobre el campo causaron por lo menos 12 heridos leves, en su mayoría policías, indicaron fuentes médicas palestinas. Minutos después en Tulkarem, en el norte de Cisjordania, un F-16 israelí disparó un misil sobre un edificio oficial, según fuentes de seguridad.
Este misil alcanzó y destruyó un edificio cercano a la sede del gobernador, la "Mukata", que ya había sido blanco de una incursión aérea el pasado 18 de enero.
Un portavoz militar israelí confirmó en un comunicado que la aviación "atacó estos dos objetivos en respuesta a los atentados terroristas palestinos".
El portavoz confirmó el bombardeo del edificio de Tulkarem, de donde, según él, era natural el autor del atentado de Tel Aviv. |