GONZALO FERNANDEZ
DE OVIEDO:
Historia General y Natural de las Indias, Libro XXIX, Cap. XXIII
"PEDRARIAS
Y LA CONQUISTA DEL PERU" (1527)
En aquel tiempo (1527) yo tuve ciertas cuentas
con Pedrarias, y haciendo la averiguación de ellas en
su casa, donde nos juntábamos a cuenta, entró el
capitán Diego de Almagro un día y le dijo: Señor,
ya vuestra señoría sabe que en esta armada y descubrimiento
del Perú tenéis parte con el capitán Francisco
Pizarro y con el maestrescuela Fernando de Luque, mis compañeros
y conmigo; y que no habéis puesto en ella cosa alguna,
y que nosotros estamos perdidos y habemos gastado nuestras haciendas
y las de otros nuestros amigos, y nos cuesta hasta el presente
sobre quince mil castellanos de oro; y ahora el capitán
Francisco Pizarro y los cristianos que con él están,
tienen mucha necesidad de socorro, y gente y caballos, y otras
muchas cosas, para proveerlos, y porque no nos acabemos de perder
ni se pierda tan buen principio como el que tenemos en esta empresa
de que tanto bien se espera, suplico a vuestra señoría
que nos socorráis con algunas vacas para hacer carnes
y con algunos dineros para comprar caballos y otras cosas de
que hay necesidad, así como jarcias y lonas y pez para
los navíos que en todo se tendrá buena cuenta y
la hay de lo que hasta aquí se ha gastado, para que así
goce cada uno y contribuya por rata según la parte que
tuviere.Y pues sois partícipe en este descubrimiento por
la capitulación que tenemos, no seáis, señor,
causa que el tiempo se haya perdido y nosotros con él,
o si no queréis atender el fin de este negocio, pagad
lo que hasta aquí os cabe por rata, y dejémoslo
todo.A lo cual Pedrarias desque hubo dicho Almagro, respondió
muy enojado y dijo: Bien parece que dejo yo la gobernación,
pues vos decís eso:que lo que yo pagara sino me hubieran
quitado el oficio, fuera que me diérades muy estrecha
cuenta de los cristianos que son muertos por culpa de Pizarro
y vuestra y que habéis destruído la tierra al rey;
y de todos esos desórdenes y muertes habéis de
dar razón, como presto lo veréis antes de que salgáis
de Panamá. A lo cual replicó el capitán
Almagro, y le dijo: Señor, dejaos de eso: que pues
hay justicia y juez que nos tenga en ella, muy bien es que todos
den cuenta de los vivos y de los muertos; y no faltará
a vos señor, de que deis cuenta y yo la daré y
Pizarro de manera que el Emperador nuestro señor, os haga
muchas y grandes mercedes por nuestro servicio. Pagad si queréis
gozar de esta empresa, pues que no sudáis ni trabajáis
en ella, ni habéis puesto en ello sino una ternera que
nos diste al tiempo de la partida, que podía valer dos
o tres pesos de oro, o alzad la mano del negocio, y soltaros
hemos la mitad de lo que nos debéis en lo que se ha gastado.
A esto replicó Pedrarias riéndose de mala gana
, y dijo: No lo perdieredes todo y me dariedes cuatro mil
pesos. Y Almagro dijo: Todo lo que nos debéis
os soltamos y dejadnos con Dios acabar de perder o ganar.
Como Pedrarias vio que ya le soltaban lo que él debía
en la armada, que a buena cuenta eran más de cuatro o
cinco mil pesos, dijo ¡Qué me daréis
demas de esso?. Almagro dijo: daros he trescientos
pesos (muy exonado, y juraba a Dios que no los tenía,
pero que los buscaría, para apartarse de él y no
pedirle nada). Pedrarias replicó y dijo: Y aún
dos mil me daréisEntonces Almagro dijo: Daros
he quinientos. Más de mil me daréis,
dijo Pedrarias. El continuando su enojo Almagro dijo:Mil
pesos os doy, y no los tengo pero yo daré seguridad de
los pagar en el término que me obligare. Y Pedrarias
dijo que era contento. Y así se hizo cierta escritura
de concierto, en que quedó de le pagar mil pesos de oro,
con que se saliese, como se salió, de la compañía
de Pedrarias, y alzó la mano de todo aquello, y yo fui
uno de los testigos que firmaron el asiento y conveniencia y
Pedrarias se desistió y renunció todo su derecho
en Almagro y su compañía. Y de esta forma salió
del negocio, y por su poquedad dejó de atender para gozar
de tan gran tesoro, como es notorio que se ha habido en aquellas
partes.
JOSE DE
ACOSTA
Nació en 1540 en la
ciudad de Medina del Campo y falleció en 1600.
En 1562, fue ordenado sacerdote en la Compañía
de Jesús .En 1571, fue destinado a las misiones jesuitas
de los Andes en el Perú.Producto de su estancia en tierra
americanas es su Historia Natural y Moral de las Indias.
La ruta de
Francisco Pizarro desde Panamá hasta el Cuzco
( Paolo Novaresio:
The Explorers). |
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