El Juzgado Cuarto Penal de la provincia de Chiriquí mandó a ampliar un expediente relacionado con el derribo de una aeronave mexicana, registrado el año pasado , la cual llevaba en su interior 400 kilos de cocaína recogida en las fincas bananeras.
La acción penal surge por deficiencias en la investigación por parte de la Fiscalía Primera de Drogas. Se conoció, además, que el abogado Froilán Hormechea, defensor del panameño Heriberto López, se quejó de las demoras en este caso y de la deficiencia en la investigación.
Una aeronave mexicana fue derribada por el helicóptero del Servicio Aéreo Nacional 132, tras negarse a volver a la pista de aterrizaje de Finca Jagua, en la zona bananera del distrito del Barú, luego de despegar cargada de 400 kilos de presunta cocaína.
El piloto Justiniano Jaques Arrechiva, de Chihuahua, México, murió al caer la nave en medio de los bananales. El copiloto Marcos Edgar Rivera Tamayo, salió a Finca Lechoza a pedir ayuda, y tenía una herida en una ceja.
Los panameños Heriberto López, los primos Eric y Martín Ibarra, así como el mexicano, el copiloto Marcos Tamayo, se encuentran presos desde hace casi un año en La Joyita.
La aeronave llevaba una matrícula pegada con cinta adhesiva TI-TLI, y había aterrizado en la pista privada de Jagua, propiedad de la Cooperativa de Servicios Múltiples de Puerto Armuelles, presuntamente para abastecerse de combustible y cargar la droga que llegó en un pick up.
La operación que dio como resultado la derribada de la nave era parte de un seguimiento de la Fiscalía de Drogas. Entre los detenidos figura el acompañante que iba en la aeronave, dos miembros de la seguridad privada que tiene COOSEMUPAR y dos ciudadanos que se transportaban en el pick -up.
De acuerdo con los residentes de Finca Lechoza, los primeros disparos se registraron a la 1:00 p.m. del domingo 16 de abril, cuando se escucharon las ráfagas de las ametralladoras del SAN y después de 30 minutos, se oyó el desplome de la aeronave.
Luego de abastecerse y despegar fue interceptada por el SAN y al mostrar resistencia, se vieron en la obligación de dispararle, pues se encontraba a pocos kilómetros de la línea fronteriza con el vecino país Costa Rica.