A partir del mes de febrero del próximo año, el departamento de Prevención y Control de Zoonosis del Ministerio de Salud (MINSA) estará vigilante que los porcinocultores de la provincia de Chiriquí cumplan con las disposiciones de la Ley 357.
Las medidas de esta ley conllevan a no sacrificar en mataderos certificados cerdo, cuyas áreas de criaderos no cuenten con un plano y una cerca perimetral en las instalaciones de la finca o granja.
Guillermo Chen, director Regional de Zoonosis, manifestó que durante los últimos años se ha reducido el número de granjas que se dedican a la cría de cerdos en Chiriquí, debido a los bajos precios que se registran en el proceso de comercialización de estos animales en pie.