Tres niños fueron víctimas de las bombitas, informó la jefa del Cuarto de urgencias del Hospital Manuel Amador Guerrero, en Colón.
Los tres niños, de 6, 10 y 12 años, resultaron con quemaduras en los dedos y manos, al usar las bombitas que adquieren porque los dueños de negocios se las venden.
Dos de los menores fueron atendidos de manera ambulatoria y el tercero está en la sala de pediatría del HMAG.
En diciembre es cuando más casos de niños quemados con bombitas son atendidos en ese centro médico.
Las autoridades médicas del lugar hicieron un llamado a los padres de familia para que estén más pendientes de sus hijos, al tiempo que piden a las autoridades que pongan control a los vendedores.
Se espera que este año disminuyan esos casos.