Un niño de 3 años murió la tarde del jueves en el Hospital de Changuinola, en Bocas del Toro, después de un día que lo mordió un alacrán mientras jugaba en su vivienda ubicada en Bisira, comarca Ngobë Buglé.
Los padres lo llevaron al Centro de Salud de la comunidad, pero no había suero. Es el segundo hijo que pierden de la misma forma.