Bueno, bueno, mientras Martincito desde los madriles, con una copa de champaña en la mano y en medio de la realeza hispana (dije realeza no rareza) escupía contra lo que describió como los políticos que se aprovechaban de la tragedia humana para hacer méritos, aludiendo a las inundaciones en tres provincias con saldo de pérdidas de vida y millones en daños materiales, no tomó inmediatamente el viaje de regreso, porque al día siguiente le devolvía la recepción a los monarcas y esperaba salir en HOLA ¿o no?
Por cierto manifestó haber logrado ayuda humanitaria en España y otros países, mientras acá le dejaba el trabajo al segundo vice que para eso está.
En el patio, si bien cidiáticos-unioneros ratificaron la candidatura del 99, este se trasladó a las zonas afectadas para conocer de primera mano la magnitud de la tragedia y determinar el nivel de su ayuda. Otra que también se trasladó allá fue la exmiviosa.
El ñame seco hizo un gran show en la convención, aunque definitivamente no le sigue yendo muy bien en las encuestas. Más bien, aceptó ser un burro y no necesariamente el de los republicanos gringos, quienes además perdieron ante el moreno.
La verdad es que se están barajando varias estrategias por parte de los diferentes grupos de campaña.
Como las necesidades del país son las mismas (seguridad, vida digna, educación, salud, progreso compartido) el discurso de propuestas no será diferente entre los contrarios cosa que conocen sus respectivos estrategas, sumado a ello, la desconfianza del elector en cuanto al cumplimiento de las mismas, por la experiencia habida (la más inmediata: más seguridad y cero corrupción). Entonces resulta obvio, como ya lo he venido diciendo con anterioridad, que sólo queda el camino del discurso descalificativo. Esperen y verán.
Insisto. El enemigo del zapatos de cartón no es la perrediana sino el ñame seco y viceversa. O sea, que para que alguno de los dos gane, debe acabar con el otro, ya que de lo contrario, en una pugna cerrada entre ambos reducirían su margen para ganar lo cual favorecería a la aristócrata del proletariado. Por ello, las campañas de ambos están centradas en atacar al otro.
Esta situación y como marcan las encuestas permite a los estrategas del mundo perrediano ayudar bajo cuerda al manicomio y por ahí hay un runrún de que la gente del partido gobiernista compró 250 boletos de mil tucos cada uno de una cena de captación de votos para el ñame seco, ¿o no?
En cuanto a la relación exmiviosa-Martincito, nada más como prueba la crítica de gente del gobierno en el sentido de que la campaña política de la aristócrata del proletariado no está ponderando las buenas acciones de la administración pública. ¿O si?
En otro nivel ni el bobito ni el ñame balumba parecen querer debatir con los BBB (Bernal, Batista, Blasser). El que tiene miedo que se compre un vice.
Bueno eso es todo por hoy, pero tranquilos que el próximo jueves habrá más.