Luis Contreras, una de las víctimas del accidente del bus 8B-06, fue sometido con éxito a nuevas operaciones reconstructivas para mejorar su calidad de vida, luego de los sucesos de 2006.
Contreras fue intervenido en el Memorial Hermann Hospital de los Estados Unidos, donde se le practicaron cirugías plásticas en los lóbulos, se le reconstruyó la hélice superior, así como la liberación y colgajos de transposición de z-plastía en quemaduras de la axila derecha y la pared torácica anterior.
El 23 de octubre del 2006, 18 personas murieron al incendiarse el bus en que viajaban.