El despachador de gasolina, Porfirio Ramos, de 42 años, recibió un tiro en la espalda, después de que dos delincuentes que asaltaron la estación Texaco de la vía Domingo Díaz, en la entrada de San Cristóbal de Juan Díaz.
Porfirio, quien era considerado por sus jefes como un excelente empleado, al punto de que ganó varios premios, dejó en la orfandad a una hija adolescente, y en el desconsuelo a su esposa con la que convivió 17 años, y a su madre.
El monto de lo robado asciende a 150 dólares. Los delincuentes huyeron, pero fueron captados en video.