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TEMAS DE ACTUALIDAD
¿Ausencia de autoridad, o indiferencia ante la ley?
Raymundo A. Moore W.
El gobierno anterior se preocupó, de una manera casi enfermiza, por ampliar la red vial nacional (mas no de aquellos caminos vecinales o de penetracción), tanto... que fíjense ustedes que si en algo sirvió: ¡aumentó la cantidad de muertes por accidentes de tránsito en casi todas las principales vías del país! (imagínense... autorizar a la población a correr a ¡ciento diez kilómetros por hora!); ello, sin embargo, aprecio yo, es el precio que se debe pagar para "mantenernos" en el siempre creciente marco de la macro economía mundial, como la viven los países densamente desarrollados (léase, industrializados). Pero actualmente hay un punto o intersección vial, aquí mismito en la ciudad, que es de lo más problemático, para propios y extraños, uno ubicado precisamente sobre la Vía Ricardo J. Alfaro (Tumba Muerto), o sea ese donde se forma el cuello de botella al inicio del Puente de San Miguelito, frente a los estacionamientos de El Machetazo, lugar donde los tranques que diariamente se vive es como para volver loco... y esto no es porque el cambio de luz del semáforo sea lento, o que el agente que a veces dirige el tráfico tampoco lo sea. Allí lo que se percibe es una verdadera anarquía por parte de los automovilistas quienes no exhiben el más mínimo respeto por las normas del buen conducir. Pero como este es un tema harto conocido por todos, voy a "saltar" los otros detalles inherentes, para, de una vez, proponer una solución, compuesta por las siguientes alternativas. ALTERNATIVA (A) Levantar una barrera central de concreto (tipo Puente Las Américas - Arraiján), desde la intersección del antiguo IRHE (hoy Elektra Noreste), comenzando justo a la entrada que da a "Hielo Fiesta", hasta el inicio del mismo puente. ¿Ventajas? Se acentuaría la hegemonía que debe existir entre el paño que conduce al puente (que sería el lado izquierdo de la barrera), así como aquel que nos lleva en dirección debajo del puente y recto hacia Paraíso (este sería el lado derecho de la barrera). De esta manera se elimina definitivamente la "coladera" de todos los impacientes que no les gusta "hacer fila", y es lo que ocasiona el desagradable "relajo" (desorden), y el interminable "embotellamiento" en el área. ALTERNATIVA (B) Apostar a un Agente (inspector) de Tránsito, permanentemente, (uno diferente cada día), en las inmediaciones de la entrada de dicho puente, quien estaría asistido por conos colocados en una hilera de, digamos, unos 500 metros hacia atrás, ello obligaría igualmente a los conductores a situarse uno detrás del otro, para evitar, como en la Alternativa (A), la "coladera" de gente que nunca piensa en nadie más que en ellos. Si ninguna de las dos alternativas aquí propuestas es tomada en cuenta con la objetividad con que han sido planteadas, entonces entenderé que, o existe una verdadera - y lamentable - ausencia de autoridad, donde ex profeso se elude responsabilidades, o, por el contrario, la indiferencia popular para el acatamiento de la ley es tan notoria, que ningún conductor teme represalias, de ninguna índole, por parte de las autoridades, de allí la anarquía. ¡Au Revoir!
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