La panameña Indira Díaz, de 37 años, residente por varios años en Brooklyn, New York, Estados Unidos, fue asesinada a golpes con un madero por su cónyuge salvadoreño.
El pasado 22 de septiembre la mujer, madre de dos niños, recibió de parte del hombre que decía amarla, un golpe contundente en la cabeza con un madero que le causó lesiones fatales.
El asesino acostumbraba a golpear a Indira, quien por temor no se atrevió a denunciar el caso de violencia familiar. El día del homicidio, el sujeto la golpeó sin consideración en la cabeza, frente a sus dos hijos de 14 y 4 años.
El hijo de 14 años también fue atacado por varios sujetos en Far Rocaway, Condado de New York, que lo golpearon hasta hacerle perder un diente, porque querían robarle el dinero que lleva a la escuela.
Marcelina Heredia, madre de la hoy occisa, viajó a los Estados Unidos el pasado 24 de septiembre, fecha en la que exactamente murió su hija, quien se encontraba hospitalizada.
El cuerpo de la mujer fue trasladado a Panamá donde se le dará cristiana sepultura, sin embargo, su familia no cuenta con recursos para el sepelio, según informó su madre Marcelina.
El consulado de New York en Panamá apoyó con algunos gastos, pero se necesitan más recursos. Se conoció que aunque el sujeto trató de evadir la justicia, el gobierno norteamericano lo puso a buen recaudo donde pagará su condena por homicidio.
VICTIMAS: DOS MUEREN LEJOS DEL PAIS
En menos de un mes, dos mujeres panameñas han sido asesinados en otros países. La primera fue Ali Dessire Cuevas, en México, el 20 de septiembre; y ahora, Indira, el 24 del mismo mes.