El presidente sudcoreano, Roh Moo-hyun, propuso celebrar un referendo a mediados de diciembre sobre su gobierno y prometió renunciar y convocar a nuevas elecciones presidenciales si la votación lo repudia.
Profundizando una autoinfligida crisis política que ha sorprendido a partidarios y opositores por igual, Roh dijo al parlamento que había perdido la confianza para desempeñar sus deberes debido a las disputas políticas y la hostilidad de la prensa.
Tras comentarios el viernes y el sábado en los que prometió arriesgar su cargo, Roh dijo que quisiera una fecha alrededor del 15 de septiembre para un referendo que renueve el mandato para su presidencia, en medio de un escándalo de fondos de campaña de uno de sus asesores. |