El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, el gobernador del estado homónimo, Sergio Cabral, y tres ministros del Gobierno federal fueron al Cristo Redentor para un acto religioso en el que se pedía ayuda espiritual para que la ciudad sea escogida como sede de los Juegos Olímpicos de 2016. El acto se llevó a cabo en la imponente estatua.