Un reo muerto por sus propios compañeros y varios más con heridas leves, fue el saldo de un intentó de fuga protagonizado anoche por los internos de la prisión preventiva de Escuintla, a 57 kilómetros al sur de la capital.
Los reclusos, en su mayoría integrantes de las pandillas juveniles denominadas "los cholos", asesinaron a golpes en el interior de un baño a uno de los reos de esa prisión, "para llamar la atención de las autoridades", dijo ayer un portavoz de la Policía Nacional Civil (PNC).
En el momento en que los agentes y Fiscales del Ministerio Público ingresaron para levantar el cadáver del reo asesinado, unos 400 reclusos intentaron amotinarse con el objetivo de darse a la fuga, detalló el portavoz.
Los reos amotinados destruyeron el techo del centro preventivo, así como los baños y otras instalaciones de ese lugar, denunciaron las autoridades penitenciarias.
Los agentes de la PNC utilizaron bombas lacrimógenas para controlar a los amotinados y obligarlos a que regresaran a sus celdas. Algunos reos, si precisar cifras, resultaron con heridas leves durante la refriega, agregó la fuente.
Una hora después de iniciado el motín, las autoridades aseguraron que habían recuperado en control de la prisión. "Los cholos" fueron trasladados a la prisión preventiva de Escuintla en abril pasado, luego del sangriento motín que protagonizaron en el Centro Preventivo de Pavocinto, en diciembre pasado, cuando asesinaron a 14 internos. |