Qué lamentable fue saber que la mala condición climática en la ciudad de Puebla impidió ayer que las selecciones de Panamá y México midieran su actual nivel futbolístico.
Primero porque el partido despertó grandes expectativas, no solo para los anfitriones aztecas que anhelaban ver a sus nuevas promesas del fútbol, Giovani dos Santos y Carlos Vela, jugadores de la primera división del Barcelona y Osasuna, respectivamente, sino también para los panameños que también ansiábamos observar el nuevo experimento del técnico Alexandre Guimaraes, quien para este y el otro encuentro del próximo miércoles frente a Venezuela, convocó a figuras jóvenes y jugadores que aún no habíamos visto actuar juntos como es el caso de Blas Pérez y Roberto Brown.
Si bien en esta ocasión ambos lo hicieron, la cancha del Estadio Cuauhtémoc Blanco no se prestó para que ellos y el resto de los futbolistas, incluso los mexicanos, pudieran desplegar su mejor fútbol.
Por otro lado, aún queda Viva, Crítica en Línea la espinita de saber que no se dispuso del tiempo suficiente para cobrar la ansiada revancha de la derrota sufrida por 0-1 en la pasada Copa Oro.
De igual forma, causa tristeza saber que no se pudo aprovechar al máximo la inversión de más de 20 mil dólares que se hizo para traer a los futbolistas que militan en clubes extranjeros ante un rival de lujo como lo es México.
Pero dentro de todo esto, vale la pena mencionar la acertada la decisión que adoptaron dirigentes y técnicos de no continuar el encuentro, previendo que algunos jugadores pudieran salir lesionados.
Ahora, lo importante como lo mencionaron algunos jugadores entrevistados por RPC Radio, es que se concentren en el partido que sostendrán este miércoles contra Venezuela, que si bien no es un rival de la categoría (trayectoria histórica) del "Tri", también ha logrado registrar, al igual que Panamá, importantes avances en materia futbolística.
He ahí que entonces tanto técnico como seleccionados reflexionen sobre las situaciones que hay que corregir y que de seguro les serán de mucho beneficio o perjuicio para la eliminatoria mundialista que se avecina.
En Panamá, estaremos pendiente de lo que se viene.