Un saldo negativo en la ejecución presupuestaria del Estado de 179 millones de balboas al 30 de junio del 2004, una deuda pública de 9,059.8 millones de balboas, y una planilla estatal que aumentó en 361 mil balboas a pesar de tener 2,797 empleados menos, es el estado en que la administración Moscoso deja las finanzas públicas a Martín Torrijos y su equipo económico.
Así lo deja ver un informe ejecutivo de las finanzas del sector público, la planilla y la economía nacional elaborado por la Contraloría General de la República.
Las cifras al 30 de junio pasado, destacan que las recaudaciones del sector público ascendieron a 3,656.2 millones de balboas, pero que los gastos fueron mayores (3,835.3 millones).
El gobierno central registró ingresos por 1,219.2 millones de balboas y egresos de 1,580 millones, lo que representa un resultado negativo de 361.7 millones de balboas; esto sin incluir los saldos de contratos por ejecutar, por unos 129.2 millones.
En cuanto a la deuda pública, el informe destaca que el compromiso externo asciende a 129.3 millones de balboas, mientras que el interno suma 211.1 millones.
El total de la planilla estatal es de 148,219 empleados, los cuales en conjunto devenan un salario mensual de 97 millones 511 mil balboas. Sacando un promedio de todos los salarios del sector público, sale una cifra de 671 balboas mensuales.
Cabe mencionar que el informe recalca que aunque la planilla total bajó de 148,219 empleados en diciembre de 2003 a 145,422 funcionarios en junio del 2004, se pagó más en salarios para este último semestre que en el que le precedió.
Unos 54,608 empleados son del gobierno central; 35,535 laboran en instituciones descentralizadas; 7,332 en empresas públicas, y 5,219 en intermediarios financieros.