EDITORIAL
Todos a votar
En menos de setenta y dos
horas estaremos inmersos en el paso final de la consulta popular que definirá
la suerte del proyecto de reformas constitucionales introducido por el régimen
perredista a la consideración del voto, cuyas propuestas han sido
objeto de serenos análisis, amplia discusión y general rechazo
por la mayoría de los expositores en los medios masivos de comunicación.
La frágil estrategia de consultar tres temáticas constitucionales,
envueltas en el referéndum, intenta distraer el real, verdadero y
trascendente propósito de la modificación constitucional,
cual es permitirle al actual mandatario prolongar por cinco años,
su permanencia en el cargo.
El escondido propósito asienta en las agigantadas estimas que
el mandatario se atribuye, para quien, la materialización de la obra
de gobierno que propugna requiere de su conducción iluminada y firme.
La tradición histórica del constitucionalismo panameño
recoge el rechazo de la renovación inmediata para mantener en la
Presidencia a quien se le vence el período; es más, palabras
proféticas del Dr. Manuel Amador Guerrero, al rechazar oferta reeleccionista,
sincera la realidad de quienes buscan perpetuarse en el poder, aferrarse
al mando, y para ello no frenan quehaceres, apetitos y ejecutorias impositores.
La alternancia, o alternabilidad en el cargo de mayor importancia política
y burocrática, es medida sanitaria; permite aerear los ejercicios
públicos, evita alargar encubrimientos, cancela dispendios, desnuda
favoritismos y aprovechadas sinecuras, y materializa el recio fundamento
de la democracia; régimen de libre juego de ideas y acciones.
La reelección inmediata que pretende introducir la reforma en
referéndum incorpora contrapelos a la vida cívica y política
panameña; ella es la expresión de desbordadas aspiraciones
del actual Presidente, quien se autocalifica como mejor mandatario en la
historia istmeña, y se declara insustituible e irremplazable, en
el rumbo nacional.
El asentamiento firme y raizal de la vida democrática en Panamá,
superado el trauma militarista del noriegato, reclama ampliación
de horizontes sociales y políticos, y rechaza las cerrazones enajenadas
del perredismo al mando.
Los panameños votantes deben, con total claridad, entender que
el evento comicial del próximo domingo exige participación
masiva, decidida, de asistencia desbordada para en cívico torneo
expresar la voluntad mayoritaria. Por lo que no dudamos en pedir el NO rotundo,
contundente, arrollador, contra el intento perpetuador que busca el perredé
y sus acólitos sumisos.
Una marcha multitudinaria contra las reformas se realizará hoy:
Coincide la fecha con la de la "Cita con la Patria", de 1953,
donde un consenso nacional impulsó las reclamaciones canaleras: Ojalá
similar clima patriótico nos hermane frente a la peligrosa medida
reeleccionista en referéndum, cancelándola con un NO triunfal
y justiciero.
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AYER GRAFICO |
Edificios de la primera exposición nacional albergan ahora la gobernación. |
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