El gobierno del presidente Evo Morales descartó una reunión con opositores para buscar una solución al conflicto que vive el país, al tiempo que respaldó la movilización de organizaciones sociales para defender la Asamblea Constituyente.
El vicepresidente Alvaro García Linera dijo a la radio estatal Patria Nueva que el Ejecutivo "no ve ni necesario, ni importante" una reunión política para analizar la situación, pero, en cambio, sostuvo que una "cumbre" de movimientos sociales en Sucre "era una idea excelente".