Como difícil calificó el presidente Martín Torrijos su primer año que está por cumplir. El mandatario, quien asistió ayer a una reunión de alcaldes, representantes y demás autoridades de la provincia de Chiriquí, reconoció que sí se han hecho obras necesarias y advirtió que el asunto de la Caja de Seguro Social tenía que resolverse, pues hay problemas.
Expresó que esto resuelve el tema de la seguridad social que iba camino a la bancarrota. A través de la Ley 17 que se mantiene dentro del diálogo, buscando las opiniones que permitan hacerla mejor, construirán la voluntad de preservar el sistema.
Torrijos destacó que en esa provincia se han ejecutado programas que se habían mantenido paralizados, a pesar de que eran muy importantes para el desarrollo de la región, entre los que destacó la ampliación a cuatro carriles de la vía Concepción Frontera, de igual manera la nueva estructura de servicios de las instituciones que se ubican en el sector de Paso Canoa, a fin de mejorar la atención en este importante sector del país.
Sobre la gestión que ha hecho el presidente, el arzobispo de Panamá, monseñor José Dimas Cedeño, evitó pronunciarse sobre un balance del primer año de gobierno y aseguró estar a la espera de evaluaciones e informes de expertos para juzgar la actual administración.
"Me es muy difícil hacer de juez sobre esta administración de gobierno, ya que para ello hay instituciones y personas con la capacidad y la información para juzgar esta administración" indicó monseñor Cedeño.
