Para nadie es secreto la realidad de la cárcel pública de David, en donde la población sobrepasa tres veces la capacidad.
Hace años se habló de un proyecto que busca trasladar esta estructura hacia el corregimiento de Chiriquí, dentro de 60 hectáreas de terreno que ayudarían a ejecutar toda clase de programas prácticos.
Este al parecer sería el sitio más apropiado, porque es un lugar apartado del centro de la ciudad y porque permitiría el proceso de rehabilitación de los detenidos, dentro de un lugar en donde se puedan desarrollar diferentes actividades.
La intención existe, pero no el financiamiento.
Virgilio Vergara, gobernador de la provincia, reconoció este hecho y dijo que la actual cárcel no tiene las condiciones que se quisiera y que debería tener, por derecho.