La falta de un buen presupuesto y la consolidación del equipo trabajo fueron las dos limitantes que impidieron un mayor desarrollo en el sector educativo. Esto fue confesado por la propia ministra del ramo, Doris Rosas de Mata.
Rosas de Mata reveló que el equipo con que contó "no fue el ideal", agregando que a veces le mandan funcionarios y viceministros que no eran de la misma "manera de ser".
Al preguntársele si no recibió apoyo de los viceministros, respondió "ahora tengo un buen viceministro, pero llegó muy tarde".