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ABRACADABRA
"De mentiras y otras hierbas"
"Los del PRD son expertos en manipular los hechos y diseminar mentiras"
 Carlos Guevara Mann
Colaborador
Es irónico que el canciller norieguista, Jorge Eduardo Ritter, acuse de mentiroso al ministro designado de Relaciones Exteriores, José Miguel Alemán. Según informó La Prensa de ayer (20 de agosto), Ritter deplora "que las festividades de toma de posesión de doña Mireya Moscoso se hayan iniciado con un festival de mentiras''. El canciller norieguista parece creer que los panameños olvidamos qué clase de individuo es él y la sumisión abyecta con que sirvió a la narcodictadura militar, primero como embajador en Colombia y luego, en los estertores finales del noriegato, como ministro de Relaciones Exteriores. Cuando fue negociador del CMA, durante esta torodictadura que gracias a Dios está por fenecer, se dedicó a confundir y ocultar al pueblo panameño los detalles de lo que el PRD planeaba entregar a Estados Unidos a cambio del apoyo de Washington al PRD y la reelección. Ante el pueblo declaraba que el acuerdo que se negociaba no menoscabaría en nada nuestra integridad nacional, pero ante los norteamericanos comprometía nuestra soberanía, sin manifestar escrúpulo alguno. Fuentes informativas nacionales y extranjeras lo han vinculado a un negociado de venta de automóviles de lujo a narcotraficantes colombianos. Se le ha atribuido la participación en esta actividad en 1985, mientras fungía de embajador de Noriega en Colombia (La Prensa, 22 de abril de 1994; 12 de febrero de 1995; 10 y 12 de septiembre de 1997). Todavía peor, como ministro de Noriega solía presentarse en foros internacionales para efectuar mentirosas defensas del narcodictador y su oprobioso régimen. Ante el Consejo de Seguridad de la ONU, en abril de 1989, describió a la dictadura militar como "un sistema democráticopluralista" y a la tiranía de Noriega como un "gobierno constitucionalmente establecido". Insinuó que él y quienes como él se prestaban para ejecutar las arbitrariedades ordenadas por Noriega "representamos la dignidad y el más puro sentimiento nacionalista del país." Como lo indicó Betty Brannan Jaén, corresponsal de La Prensa, el 21 de diciembre de 1997, Ritter se refería a Panamá como si Panamá fuese Noriega y, aunque repetidamente denunció el hostigamiento de Estados Unidos contra su gobierno, "nunca mostró conciencia de la agresión desatada por ese gobierno contra su propio pueblo." Luego de las elecciones de 1989, violentamente anuladas por el narcodictador, durante la reunión de los ministros americanos de Relaciones Exteriores verificada en la OEA, el 17 de mayo de 1989, Ritter sostuvo que bajo Noriega estábamos "en el camino del perfeccionamiento de nuestra independencia y de afianzar nuestra identidad como nación... proceso que estamos llevando a cabo dentro de los parámetros de la democracia panameña" (Betty Brannan Jaén, La Prensa, 10 de septiembre de 1997). Para promover su intereses, que no son otros que los de permanecer indefinidamente en el poder y seguir aprovechando los recursos del Estado en beneficio propio, los del PRD son expertos en manipular los hechos y diseminar mentiras, sin desparpajo alguno. A eso se dedican en las postrimerías de la torodictadura, como lo demuestran las declaraciones de Ritter y otras figuras del PRD, al igual que la nefasta campaña propagandística con que desde hace unas semanas nos bombardea el gobierno. Ud., que lee estas líneas, rechace las mentiras del PRD. Haga de la toma de posesión de Mireya Moscoso una manifestación de repudio a la manipulación, la indecencia y la corrupción que tanto daño nos hacen. El 30 y 31 de agosto celebre el fin de la torodictadura y el 1 de septiembre acuda temprano al Estadio Nacional, con un cartelón que diga: NO A LAS MENTIRAS DEL PRD. Hágalo por Panamá y por sus hijos.
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