Armando Dely Valdés es figura, es historia, es leyenda... fue quien abrió la puerta para que Jorge, Julio y otros jugadores triunfaran.
Hablar de Armando es desempolvar bellos recuerdos de nuestro fútbol. No hay palabras para describir el significado de este personaje...
Ayer, luego de la noticia de su muerte, poco a poco me llamaron para conocer el hecho. Varios colegas, hasta del diario Olé, en Buenos Aires.
En ACAN-EFE salió la nota completa de su carrera. Que se puede resumir en gloria, gloria para todo un país.
Soy un completo seguidor de la teoría que los hombres se juzgan por sus actos. Y en el caso de Armando lo que veremos será la entrega total por el fútbol.
Hoy desde esta sala de redacción nos sumamos al luto del fútbol nacional.
También somos conscientes del dolor familiar, y en el caso de sus hermanos Julio y Jorge, quienes están defendiendo a la patria en El Salvador.
Hoy somos solidarios con todos ellos... Con toda una provincia colonense. Paz a su alma.
COMO TECNICO
El secretario general de la FEPAFUT, Ramón Cardoze, declaró que "es lamentable el deceso de Armando; ha sido uno de los grandes jugadores que hemos tenido. Hará mucha falta".
Recordó que tras dejar su carrera se inició como entrenador y llegó a dirigir la Sub-20, y fue asistente técnico de la selección mayor en 1996 y 2001.
PASO A PASO EN LA MONTAÑA
Armando Dely nació en Colón, donde jugó desde niño en múltiples competiciones, tanto en el colegio como en el barrio.
CON EL A. JR.
Gracias a su talento dio un enorme paso al ingresar a las filas del Argentinos Juniors, en ese momento tenía el título de ese país.
FINAL DE LUJO
En 1986, logró, junto al Juniors, ganar la Copa Libertadores y disputar la prestigiosa Copa Intercontinental, pero perdieron con el Juventus.