Venezuela pisó ayer el acelerador y quedó sola al frente de los Juegos Centroamericanos con una leve distancia sobre Colombia, la misma que necesitó el velocista Churandy Martina para volver a coronarse como el hombre más rápido de la competición.
Los venezolanos apoyaron su avance en la recogida de oros en los deportes de combate y en el ciclismo en pista, mientras Colombia hizo un más que destacado papel en atletismo y con sus dos triunfos en los 10.000 femenino y la jabalina masculina sumó cuatro oros, tres platas y cinco bronces.