Este árbol crece en la mayor parte de los países tropicales de América, crece a bajas y medianas elevaciones, en climas secos a húmedos. Se encuentra en lugares abiertos, fincas y bosques secundarios secos del Pacífico en el Canal de Panamá, pero es raro o ausente en bosques lluviosos del Caribe.
Es común en sitios abiertos y áreas degradadas con suelos pedregosos, resiste las quemas e incendios periódicos.
En su ambiente natural crece junto con el arbusto de chumico y al marañón.
Prospera en laderas abiertas y pedregosas del bosque tropical caducifolio, también en laderas de cerros a menudo formados por rocas metamórficas y terrenos planos.
Habita en lugares con climas cálido, semicálido y templado.
Se le encuentra en suelos bastante degradados. Puede soportar condiciones de drenaje excesivamente rápido o con drenaje deficiente que se inundan en la época húmeda y se secan en el periodo de sequía. Se le observa en áreas de cultivo abandonado.
Suelos: moreno rocoso, arcilloso, amarillo arcilloso, lava volcánica, café pedregoso y calizo.