El primer ministro, Ariel Sharon, y el líder laborista, Simón Peres, están decididos a formar un Gobierno de unidad nacional a pesar de la fuerte oposición que la medida despierta en sus respectivos partidos.
Sharon y Peres se reunieron en Jerusalén para "comunicarse" lo que es un secreto a voces, que el futuro político de ambos depende del otro. Peres busca reactivar la alianza política de 2001.
Mientras, Sharon espera llevar adelante su plan unilateral para evacuar Gaza.