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En lo que respecta a los colores, Rei Kawabuko (Comme des GarÇons) da libre curso a su imaginación: verde y rosa fluorescentes iluminan los trajes a cuadros de estilo inglés.  |
Colores vivos e incluso fluorescentes, estampados de todo tipo, profusión de cuadros y rayas, la moda masculina para la temporada primavera-verano 2002, presentada durante cuatro días en París, propone un estilo informal, entre ciudad y playa.
Kenzo versión Roy Krejberg, Paul Smith y Daniel Faret optan por las composiciones con rayas, anchas o angostas, entrecortadas de estampados floreados, que aparecen también en los modelos del belga Dries Van Noten.en la de Francesco Smalto y, por supuesto en Léonard.
Hermes (Véronique Nichanian) adopta el verde limón y el azul agua, el verde bronce y el azul marino.Yohji Yamamoto recurrió incluso a su paleta de colores vivos para pintar rostros de actrices del cine japones en las telas negras. Hedi Slimane para Dior pone rojo entre el negro y el blanco o crea un verdadero fuego artificial de naranja para poner punto final a su colección.
No obstante, el negro resiste, sobre todo para la noche, pero para utilizarlo de día hay que dirigirse a los incondicionales, como Tom Ford (YSL Rive Gauche).Dominique Morlotti, más simple, lo elige como paradigma de elegancia discreta "que no sigue la corriente de la moda". |
