¿Qué tienen en común los expedientes de Mónica Serrano, José Ciérvides y el bombazo de Alas Chiricanas?
Que los tres tienen la misma respuesta: no han sido resueltos.
MONICA SERRANO
Un año y medio lleno de angustia, agonía y misterio. Nadie sabe nada de la pequeña Mónica Serrano, desaparecida en febrero del 2002, en Arraiján.
Han sido días y noches cargadas de sobresaltos, desesperación, impotencia, rabia, dolor pero también salpicadas de esperanzas.
Las investigaciones no han llegado a ningún punto de partida, lo que mantiene a un padre, una madre, abuelos, tíos, primos y demás familiares en tribulación.
EN LA JUSTICIA
A nivel de la Corte Suprema de Justicia hay dos recursos de hábeas corpus por resolver a favor de otros dos sospechosos del plagio de la infante.
Tales acciones legales fueron interpuestas hace algún tiempo, adelantó otra fuente forense.
Jorge Jaén (el parapléjico), José Andrade Vera (el sordomudo), Daniel Rovira y la colombiana Geny Rada Calero, sospechosos de participar en este suceso, gozan de medidas cautelares otorgadas mediante fallos emitidos por la Corte Suprema de Justicia.
Luis Oriel Ramos y Julissa Ortega, otros dos presuntos implicados en el plagio, siguen presos.
El expediente está en la Fiscalía Primera Superior, cuya titular Maritza Royo está de vacaciones.
ASESINATO DE DIPLOMATICO
El asesinato del diplomático panameño Manuel José Ciérvides, acreditado en Quito, Ecuador, ha quedado envuelto en el manto del olvido.
Tres de los principales sospechosos están en libertad por medidas cautelares, mientras que hay fuertes indicios de que un cuarto vinculado desapareció de Panamá "por arte de magia".
MAS TELARAÑAS
En la Fiscalía Primera Superior se encuentra el voluminoso expediente relacionado al bombazo contra una aeronave de Alas Chiricanas, que cayó en un paraje ubicado en Colón, el 19 de julio de 1994.
Más de 20 personas, en su mayoría empresarios ligados a la Zona Libre de Colón, fallecieron en ese atentado con secuela de antisemitismo y narcotráfico. En la nave viajaba el negociante Saúl Schwartz, propietario de la empresa Simar Joyeros, blanco de pesquisas por supuesto lavado de dinero.