España y Sudáfrica disputan la final de consolación de la Copa Confederaciones, un encuentro con el único sentido económico, que representa un castigo para la "Roja", sorprendida a puertas de la final por Estados Unidos.
Los dos únicos goles que encajó España en el campeonato la alejaron de la final soñada ante Brasil y cortaron su victoriosa racha de récord.