El presidente de Nicaragua, Enrique Bolaños, dio marcha atrás en su propuesta de adelantar las elecciones presidenciales de noviembre del 2006 para desactivar una crisis institucional.
El secretario general del opositor Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN, izquierda), Daniel Ortega, retó a Bolaños a cumplir la promesa que hizo el pasado 20 de junio ante la nación de adelantar las elecciones presidenciales de 2006, para superar los problemas de gobernabilidad que enfrenta su gobierno.