Protestas en Tierras Altas tienen un trasfondo comercial y denuncian secuestro de transportista

Vielka Cádiz F.
Chiriquí - EPASA

Las protestas realizadas en el sector de Caizán, en las Tierras Altas, han sido provocadas por algunos agitadores que buscan ser beneficiados comercialmente a través de la adquisición de un cupo u otras prebendas; aseveró ayer el presidente de la Cámara Nacional del Transporte en Chiriquí, Tomás Juárez, quien denunció además el supuesto secuestro de un compañero por más de seis horas.

Juárez se pronunció en contra de las acciones de violencia que según él, significan una clara violación a la ley, al tiempo que responsabilizó a los que "se dicen ser dirigentes de esa comunidad" de cualquier cosa que le suceda a sus compañeros.

Al respecto, dijo que en la actualidad realizan las investigaciones pertinentes, para conocer quiénes son los que están aupando tales situaciones que sólo contribuyen a alterar el orden y la tranquilidad pública.

El dirigente hizo tales señalamientos, por considerar que los cuatro cupos que en la actualidad tienen los transportistas que simultáneamente prestan el servicio en Cerro Punta y Volcán, anteriormente pertenecían a residentes de la propia comunidad, quienes se despojaron de los mismos cuando observaron que el negocio no funcionó en el área.

Explicó que en esa ocasión, sus compañeros compraron el cupo con el compromiso de que también prestarían el servicio en las dos comunidades antes mencionadas, situación que se practica actualmente.

Para Juárez, las peticiones de los usuarios de Caizán resultan un tanto imposibles para la Dirección del Tránsito, toda vez que se necesitaría elaborar un nuevo expediente para cancelar los certificados de operación de sus compañeros de la ruta Caizán-Volcán, pero eso no se ha presentado.

En su intervención, el vocero explicó que en días recientes, el servicio se prestó de forma ineficiente, porque dos de los cuatro buses sufrieron algunos inconvenientes que les impidió efectuar sus recorridos, pero dicha anomalía se subsanó al momento en que la dirigencia les exigió que adoptaran cualquier medida para no perjudicar a la comunidad.

El transportista se manifestó en contra de algunas quejas surgidas en torno al mal estado de los vehículos, al afirmar que los autobuses han sido cambiados por otros nuevos y es la carretera, la que presenta pésimas condiciones.

Con relación a las denuncias de que los transportistas dejan a los usuarios a mitad de camino, Juárez precisó que cuando éstos se comprometieron a hacer la ruta, fue con el acuerdo de llegar hasta cierta comunidad y no cubrir la extensa región.

Juárez enfatizó la importancia que tiene en cualquier conflicto, hacer uso del diálogo antes de ejecutar cualquier acción, ya que así se evitan situaciones engorrosas y que perjudican a diferentes sectores de la sociedad.

Mientras tanto, solicitó a las autoridades el respeto a la integridad física de quienes se dedican a la actividad del transporte.

 

 

 

 

 




 

Juárez se pronunció en contra de las acciones de violencia que según él, significan una clara violación a la ley, al tiempo que responsabilizó a los que "se dicen ser dirigentes de esa comunidad" de cualquier cosa que le suceda a sus compañeros.

 

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