El asesinato de un italiano durante el ataque terrorista de Al Khobar, este de Arabia Saudita, horrorizó a Italia ya que fue reivindicado por Al Qaida como "un regalo" para Silvio Berlusconi a sólo cuatro días de la llegada del presidente estadounidense, George W. Bush, a Roma.
En un mensaje atribuido al saudita Abdel Aziz al-Muqrin, jefe terrorista en Arabia Saudita, el italiano Antonio Amato, de 25 años, fue degollado en protesta contra la política de Italia de apoyar la guerra en Irak.