El Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) sufrió una estafa por $50 millones y gran parte del dinero defraudado fue enviado a Panamá. Para frenar el impacto negativo que ese hecho ilícito ha causado a la imagen del gobierno, el vicepresidente Francisco Reyes López, ordenó la intervención del Seguro Social, y pidió al Procurador Luis Rosales, realizar todas las acciones necesarias para recuperar el dinero.
El ex gerente del Seguro Social, César Sandoval Morales, quien dejó el cargo en marzo pasado, colocó $50 millones pertenecientes al Programa de Invalidez, Vejez y Sobrevivencia de los afiliados del IGSS, en un fideicomiso, el cual sería utilizado para construir viviendas populares para los asegurados.
El fideicomiso lo manejaba la compañía Grupo Empresarial Uniserv, una empresa creada en 2002 por un agricultor identificado como Francisco Castellanos, quien trabajó hasta hace algunos meses como miembro de seguridad de los dirigentes del partido oficialista. Paralelamente, las empresas extranjeras "off shore" constituidas en Australia denominadas Escabel Management Group, Gateville Hondilg Corp., Helensburg Inc., y Galente Traving Limited, vendieron al fideicomiso del IGSS cinco fincas para la construcción de viviendas.
Esas propiedades, cuyo valor real en el mercado es estimado en $897 mil fueron adquiridas por el fideicomiso de Seguro Social por $30 millones.
El dinero pagado por el fideicomiso a las empresas australianos fue depositado en un banco denominado GTC Bank ubicado en Panamá, en tanto otros $10 millones fueron utilizados para comprar bonos del Tesoro del Estado guatemalteco por esas compañías. Enrique Crespo, gerente del GTC Bank aseguró que 10 millones de dólares depositados en esa institución han sido congelados, en espera de lo que resuelvan las autoridades guatemaltecas. Fueron inmovilizadas las cuentas 11014510-06, 11014359-06, 11014103-06, 11014529-06, 11014936-06, 11015096-06 y 11012607-06. |