Tanto ellas como nosotros estamos obligados a mantener la atracción y la armonía en la pareja. Uno de los problemas que más le preocupan a las parejas es la falta de atracción sexual.
Cada vez es más frecuente en las consultas de los psicólogos y sexólogos escuchar a las parejas decir: "Seguimos queriéndonos mucho, pero la pasión se ha apagado".
Este fenómeno, que se da sobre todo en las mujeres pero también afecta a los hombres, puede deberse a factores biológicos, como el descenso hormonal debido a la edad o a una intervención quirúrgica, los cuales pueden aliviarse con terapias hormonales de reemplazo, que se administran con parches sobre la piel y liberan pequeñas dosis de testosterona.
Pero la mayoría de las veces, la inapetencia sexual es provocada por problemas emocionales, como los conflictos entre la pareja, aburrimiento o la rutina en las relaciones sexuales. En este caso, los expertos te recomiendan acudir a todos los recursos disponibles para volver a encender el fuego sexual de sus brasas y cenizas.
Éstas son cuatro grandes recomendaciones de los psicólogos clínicos para recuperar la pasión cuando en ti y tu pareja el deseo e interés sexual están declinando.
Mejorar el atractivo
En cambio, si te das cuenta de que tu propia pareja es una "especie en peligro" y puedes perderla porque crea atracción e interés en los demás, la empezarás a desear más.
Una gran estrategia para que mantengan el deseo del otro es cuidar su propio atractivo, y esto lo logras mejor cuando eres una persona activa, independiente y socialmente agradable.
Fomenta la variedad y la sorpresa
Cuando la pareja hace lo mismo todos los días, a la misma hora y en el mismo lugar, rápidamente se acostumbra, por eso les conviene evitar la cotidianidad y lo predecible.
Para contrarrestarlos, tienen que introducir novedad y sorpresas emocionantes, como una cita "prometedora" en un lugar imprevisto, decirle "te deseo" cuando él menos se lo espera, una llamada insinuante, una caricia atrevida y espontánea.
Recupera las actividades emocionantes
Cuando la relación se estabiliza, puede aparecer el adormecimiento del deseo sexual.
Sin embargo, la pérdida del deseo se produce sobre todo, porque con el paso del tiempo se dejan de hacer cosas que antes se hacían.
Entonces les conviene retomar los impulsos que en el pasado les resultaron excitantes, como salir solos, ir a bailar, tener detalles como regalarse una flor, viajar juntos, tener una cena íntima, usar un perfume de otros tiempos o escuchar la música que oían en sus encuentros sexuales más apasionados.
Prepara el escenario
Los problemas sexuales están estrechamente ligados a los lugares donde se lleva a cabo el sexo. Por eso es importante que primero identifiques qué elementos apagan su deseo y así descartarlos. Luego debes identificar qué contexto los excita a los dos y entonces favorecerlo.
También pueden reavivar el interés perdido, si al escenario habitual de la relación sexual le introducen elementos nuevos y distintos; la música, luces, fotos, sonidos o perfumes pueden ayudarlos a salir de la anestesia y revivir las ganas.