Madonna protagonizó un candente beso sobre el escenario.
Durante un concierto promocional de su nuevo álbum "Hard Candy", la diva del pop besó sorpresivamente a una bailarina de su elenco, tal y como lo hizo cinco años atrás con Britney Spears y Christina Aguilera.
El gesto desató la histeria de los 1500 fanáticos reunidos en París, quienes cayeron rendidos ante la irreverencia de la artista; sin embargo, los expertos criticaron la presentación por su falta de creatividad en todo sentido.