Mientras se reanudan los contactos con las comercializadoras internacionales para la compra de la producción de sandía; los usuarios del Proyecto Integral de Riego Remigio Rojas, ubicado en Alanje, han cultivado el zapallo criollo para la agroexportación.
Los productores tomaron esta decisión, debido a la caída de la bolsa de valores y la crisis económica a nivel internacional. Esto afectó a las empresas comercializadoras.
Santiago Esquivel, presidente de la Asociación de Usuarios del Sistema de Riego, informó que hasta la fecha se han enviado unos siete contenedores con este producto hacia los Estados Unidos y Canadá, específicamente a los mercados de las colonias latinas residentes en esos países.
Entre tanto, también se ha destinado este producto para el consumo local. Luego que culmine la cosecha de esta producción, se planifica reiniciar el proceso de cultivo en el mes de noviembre.
"Este año se sembró zapallo y no se sembró sandía porque hubo muchos problemas a nivel internacional; no era una garantía para el productor", enfatizó Esquivel.
Los productores comentaron que el zapallo es un cultivo que no requiere de grandes inversiones para desarrollar la producción.
Por otra parte, se prevé reiniciar el cultivo de melones y sandías a finales de año; con el objetivo de comercializar estas frutas en la ciudad de Rotterdam, Holanda.
"Estamos iniciando las negociaciones para vender el melón amarillo y la sandía quetzalí", informó Esquivel.
Cabe señalar que existe una disponibilidad de mil 700 hectáreas en el Sistema de Riego, para cultivar estos productos no tradicionales.
RECETA PARA EL LECTOR
Puré de zapallo
Es el zapallo de color que se destina para hacer puré. La variedad empleada depende de la preferencia del que lo va a comer. Casi siempre disponible, por practico y rendidor, de buen sabor y poco fibroso yo me inclino por el "anco".
Ingrediente: Un zapallo de color de su preferencia. Nada, sal, aceite de oliva o manteca.
Preparación: El zapallo puede hervirse entero muy despacho, en trozos con corteza, sin corteza, siempre suavemente. Una vez uniformemente cocido se hace puré manualmente, sin procesar, agregando la nada, sal, aceite bueno de su preferencia o manteca. Tenga presente que es un plato aconsejado para convalecientes o heridos por los excesos de la comida. Acompaña espléndidamente una pechuga de pollo, abierta a mariposa, a la plancha o a la sartén, rociada en su plato con un hilo de aceite del bueno, de maíz, de girasol primera presión, de oliva extra virgen.... Agua mineral o un vinito blanco suave. ¡A veces conviene enfermarse un poco para comer bien!